¿Cómo podríamos medir la maestría en la alta relojería? La mayoría pensaría que a través de la complejidad mecánica o tal vez por el uso de metales o elementos preciosos, pero ¿qué tal si el barómetro fuese la capacidad de resolver problemas reales con elegancia e innovación?

Con el Récital 30, Bovet ha decidido reinterpretar el reloj de viajero moderno, ofreciendo una de las soluciones más ingeniosas y poéticas para el desafío de los husos horarios y el cambio estacional de hora. ¿Maestría a la vista? Claramente.

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La funcionalidad del Bovet Récital 30

El Récital 30 no pretende deslumbrar con exhibiciones técnicas innecesarias, sino hacer más fácil la vida de quienes viajan con precisión y armonía en cualquier parte del mundo. Con un sistema de rollers que muestra 24 ciudades, cada una vinculada a su zona horaria y a los diferentes regímenes de horario de verano, no necesita más para lucir una esfera tan llamativa como útil.

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Por si fuera poco, con un simple ajuste el usuario puede seleccionar entre cuatro periodos del año: UTC, American Summer Time, European American Summer Time y European Winter Time. El reloj adapta automáticamente todas las zonas horarias, logrando así una proeza técnica que pocas casas han logrado materializar con tanta claridad.

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Diseño y proporción en la alta relojería contemporánea

En términos estéticos, el Récital 30 tiene una caja de 42 mm, manteniendo la silueta característica de la colección, pero con un diseño más sobrio y práctico. Está disponible en titanio grado 5 o en oro rojo de 18 quilates. Su perfil curvado y su cristal abombado de zafiro ofrecen una lectura tridimensional de la hora.

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En cuanto a la mecánica, el calibre R30-70-001, completamente desarrollado por Bovet, integra 373 componentes y una reserva de marcha de 62 horas. Su acabado es impecable, con un rotor completo decorado que oculta parcialmente la máquina, una decisión estética que refuerza el concepto visual del conjunto.

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Un reloj de viajero con precisión mundial

Pero indudablemente el verdadero mérito del Récital 30 está en su utilidad. No se trata solo de mostrar la hora en diferentes ciudades, sino de hacerlo con exactitud automática, teniendo en cuenta los complejos cambios de horario entre regiones.

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Bovet incluso ha contemplado casos particulares como el de Nueva Delhi, cuyo huso horario tiene un desfase de 30 minutos, ofreciendo una versión especial con minutero adicional para mayor precisión. Todo este ingenio se traduce en una experiencia de uso fluida, ya que el reloj “piensa” por su propietario, un detalle que eleva una complicación tradicional a una herramienta moderna.

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La exclusividad artesanal de Bovet

Fiel a su filosofía de manufactura artesanal, Bovet fabrica cada pieza con un nivel de personalización excepcional. Los coleccionistas pueden solicitar variaciones en el color del dial, la ciudad de referencia o incluso grabados personalizados, reafirmando el carácter íntimo de la marca.